Pikoteo: Emprendedores Españoles por el Mundo (Amsterdam)
Miguel Martín, actual dueño de Pikoteo, es un madrileño que vive desde hace más de 10 años en Amsterdam. Este joven ejecutivo de marketing decidió un día dejar su carrera para cumplir su sueño: dar el salto y abrir su propio establecimiento de hostelería. Hoy es el dueño de Pikoteo, un tapas bar de comida española en la capital holandesa con el que quiere “dotar de mayor enjundia y modernidad al panorama hostelero español en el país” ya que, en su opinión, “se ha quedado estancado en un modelo obsoleto que no representa el nivel gastronómico que hay en España”
PIKOTEO: Comida Mediterránea con pinceladas globales
El tipo de comida que el chef madrileño ofrece a sus clientes es moderna y tiene su origen en España y el Mediterráneo, pero “con una visión global fruto de mi experiencia personal tras vivir en países como China, Indonesia o Alemania”. La tortilla de patata deconstruida, el curry rojo de rabo de toro o el bacalao al pil pil de cardamomo son algunos de los platos que ofrece Pikoteo y los que más gustan entre sus clientes. Su cocina es muy variada pero está condicionada por la materia prima disponible en el país ya que, según asegura, hay una carencia de productos, sobre todo, de “más pescado de calidad”.
Como experto en el sector de la restauración, el fundador de Pikoteo cree que la visión de nuestro país y de nuestra comida en Holanda “sigue siendo la de una opción barata, pero que les retrotrae a sus vacaciones, lo cual les encanta”. En cuanto a la comunidad emigrante española, observa que “cada vez es mayor” e identifica dos grupos diferenciados. Por un lado, están aquellos profesionales que han emigrado por una oferta de trabajo y, por otro, los que llegan con la esperanza de encontrar un empleo y una mejor calidad de vida. Independientemente de cuál sea el motivo de la expatriación, “somos gente trabajadora y fácil para la convivencia; la gente en Holanda nos valora por ello y estamos bien vistos”. “Aquí, si demuestras que trabajas duro, el cielo es el límite”, concluye el chef español.
